top of page

¿Cómo afrontar situaciones estresantes?

Actualizado: 14 dic 2022

Resulta sumamente importante aprender a distinguir entre el estrés bueno o adaptativo conocido como “Estrés” y el nocivo para nuestra salud llamado “Distrés”.

El primero lo hemos experimentado todos en algún momento de nuestras vidas, ya que se vincula con situaciones vitales que son estresantes “per se”; rendir un examen, ir a una entrevista de trabajo, mudarse, un duelo, etc.


En cambio, el distrés (estrés negativo) se genera por la acumulación de tensión diaria y constante en el transcurso del tiempo, cronificandose y generando malestar psico-físico, sufrimiento emocional. Es el que debemos aprender a evitar y/o combatir si ya está instalado.

La sintomatología física es similar a la que presenta una persona con altos niveles de ansiedad.


La clave radica en generar mecanismos de afrontamiento al estrés y a situaciones frustrantes o límite.

Ellos deben ser funcionales a nuestro estilo de vida y objetivos personales, ya que los estresores ambientales siempre estarán allí presente, lo importantes es aprender a manejarlos de la forma más saludable posible.

Cuando hablo de “afrontar el estrés”, me refiero a todos aquellos esfuerzos (cognitivos y conductuales) que ponemos en marcha ante situaciones o demandas tanto internas como externas, que desbordan nuestros recursos y capacidades, independientemente de los resultados que obtengamos.

En ocasiones anteriores hemos detallado abordajes psicoterapeúticos como el EMDR, la terapia Cognitivo-Conductual y herramientas como el Mindfulness y otras técnicas específicas que nos ayudan a autorregular y gestionar el estrés y la ansiedad.

Ahora vamos a focalizarnos en los estilos de afrontamiento. Estos mecanismos de afrontamiento están dirigidos hacia:

  • La resolución de problemas

  • El autocontrol emocional (gestión emocional)

Ambos aspectos resultan de vital importancia a la hora de enfrentar un problema o una situación conflictiva.

El bienestar personal va a depender de la eficacia de nuestros mecanismos de afrontamiento.


TIPOS DE AFRONTAMIENTO:

Las estrategias de afrontamiento orientadas:

  • a lo positivo,

  • a la distracción física

  • a esforzarse por el éxito se relacionan con un mayor nivel de bienestar integral y menor de distrés.

Mientras el auto culparse, reservar el sufrimiento y malestar para sí mismo se asocia con un peor nivel de bienestar y por ende con un grado mayor de estrés negativo.


Destacamos 3 estilos de afrontamiento:

  1. Productivo: incluye acciones y conductas dirigidas a resolver el problema, como por ejemplo buscar información sobre el problema, realizar una evaluación y análisis de las posibles soluciones con sus ventajas y desventajas, para luego elaborar un plan de acción estratégico y acorde al contexto.

  2. Pasivo o centrado en la emoción: incluye la búsqueda de ayuda profesional, espiritual, el conversar la situación con amigos a o familiares, buscando empatía, contención, nuevas formas de ver el problema y apoyo social real. Busca la aceptación del problema y regular las consecuencias emocionales negativas, disminuyendo el impacto.

  3. No productivo: se relaciona con aislamiento social, sentimiento de culpa y/o acciones que no estén orientadas a la resolución del problema.

El estilo productivo es el que nos conduce directamente a un mayor bienestar integral y menor grado de estrés negativo, aunque es complementarios, según la situación el mecanismo “centrado en la emoción”.


Siempre debemos tomar las riendas de la situación en forma activa, siendo los propios protagonistas de nuestra vida, valiéndonos de herramientas y estrategias acordes a las necesidades del momento, haciendo cosas y generando acciones y respuestas en este este sentido.


Por ejemplo, en el caso del fallecimiento de un familiar, es adaptativo utilizar el mecanismo “pasivo o centrado en la emoción”, ya que de nada vale pensar que podríamos haber hecho nosotros para evitarlo.

En este caso la sugerencia sería aceptar esta pérdida, concientizarse de la que la vida sigue adelante, orientar la energía hacia actividades y objetivos concretos y si es necesario recurrir a ayuda psicológica con un profesional.


De todos modos y aún utilizando este estilo de afrontamiento, es importante tomar la decisión desde nuestro esquema cognitivo, desde el pensamiento y contar con la voluntad para transitar la aceptación de la situación de la forma más saludable posible.


Dentro de los aspectos que favorecen un afrontamiento del estrés adecuado, destacamos:

  • Mantener una visión realista, optimista y positiva ente las dificultades

  • Sentirse afortunado por todo lo bueno que posees

  • Dedicar tiempo al deporte

  • Mantener actividad intelectual (trabajar, estudiar, leer, etc)

Por el contrario, pensar negativamente, autocastigarse (desde lo cognitivo y desde la conducta), por situaciones o decisiones y aislarse genera malestar y sufrimiento psíquico y por supuesto que no colabora a la resolución de la situación conflictiva o problemática.


Esto nos muestra cuan importante es contar con estrategias y mecanismos de afrontamiento funcionales y adecuadas para cada situación y contexto, evitando así un la aparición del distrés que tanto impacto negativo genera en nuestra calidad de vida.


¿Ya identificaste tu estilo de afrontamiento?

¿Cuál es?


No dudes en consultarme si necesitas mejorar tu estilo de afrontamiento, lograr manejar el estrés y hacer frente a los problemas de una forma más efectiva y resolutiva.


Con cariño,

Sabina




42 visualizaciones0 comentarios
bottom of page