En primera instancia debo decir que se ha incrementado notoriamente el volumen de pacientes cuyo motivo de consulta se encuentra relacionado con una vivencia de acoso laboral.
¿Qué es el acoso laboral o "mobbing"?
Se trata de una situación de hostigamiento sistemático ejercido por una o más personas hacia un trabajador o grupo de colaboradores de la misma empresa mediante violencia psicológica desplegada a través de actos hostiles; comentarios negativos hacia su trabajo, su desempeño, ideas u opiniones.
El objetivo generalmente es generar temor, desánimo y desmotivación en la persona acosada para que abandone su trabajo y renuncie a su rol, habitualmente por considerarlo “peligroso” en relación a sus intereses laborales.
Esta situación de acoso puede prolongarse durante meses y hasta años, si es que no existe una intervención al respecto.
Tipos de mobbing:
Horizontal: es cuando se da entre pares, compañeros del mismo sector, departamento o jerarquía dentro del organigrama organizacional
Vertical descendente: se ejerce desde el jefe hacia sus subalternos. Conocido también como “bossing”
Vertical ascendente: se ejerce desde los cargos inferiores hacia su jefe o supervisor
Las acciones pueden ser; gritos, insultos, desestimación de sus ideas y sugerencias, ignorar a la persona al punto de no dirigirle la palabra, referirse negativamente sobre su trabajo y rendimiento, hasta burlarse y reírse en forma explícita.
¿Qué tipo de consecuencias genera este hostigamiento en el trabajador?
Sin ningún lugar a dudas que esta violencia psicológica provoca en la víctima alteraciones psicológicas; tanto a nivel cognitivo, conductual y en su autoestima, lo que impacta directamente y en forma negativa en su performance laboral; sintiéndose desmotivado, poco valorado y querido.
La persona comienza a pensar negativamente sobre sí misma, su rol laboral, entorno laboral, la organización, etc.
Su autoestima se desequilibra, desciende por sentirte poco querido, desvalorizado y rechazado, siendo que para nuestro cerebro el hecho de sentirse rechazado implica un gran sufrimiento, tal y como si estuviéramos experimentando un dolor físico real y crónico.
A mayor tiempo de exposición a este tipo de acoso, más nocivo en intenso será el deterioro para la salud mental del trabajador hostigado.
Alteraciones psico-emocionales:
La persona violentada dentro del ámbito laboral comienza sentir miedo, desprotección, sensación de vulnerabilidad extrema, sensación de desvalorización, incapacidad y rechazo.
Si hablamos de trastornos del estado de ánimo; encontramos desde, tristeza y angustia significativa, irritabilidad hasta depresión clínica, así como también trastornos de ansiedad tales como ataque de pánico, fobia social y estados de ansiedad generalizada.
La persona acosada experimenta una gran inestabilidad emocional, con efectos muy nocivos y tóxicos para su equilibrio psico-físico.
Debido a lo anteriormente expuesto, si has detectado alguno de los síntomas y elementos detallados en este artículo, te invito a consultar con un psicoterapeuta que te ayude a restablecer tu equilibrio mente-cuerpo, a fortalecer tu autoestima y a recuperar ese balance emocional imprescindible para alcanzar tu desarrollo personal y laboral, obteniendo así un bienestar integral.
Con cariño,
Sabina
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